Capítulo 1

HOME SWEET HOME O DEL PREMONITORIO PALACIO VAMPIRO QUE EDUARDO HUANG ENCONTRÓ DESPUÉS DE UN PAR DE HORAS DE BUSCAR SU SITIO EN EL BARRIO DE USERA

Desde que descubrí mi condición vampira vi necesario "de cagarte", como dicen en los claustros escolares, encontrar una casa para mi mal y mi dieta de sangre.

Salí al barrio a ver qué podía "okupar", como dicen los representantes de IU que vienen a pedirnos el voto en Usera.


La plaza del Hidrógeno me pareció un buen sitio; pero ningún piso estaba vacío.



Esta tienda abandonada era otra opción. Pero bastaba ver cómo la luz entraba por su escaparate para darse cuenta de que no encontraría dentro el entorno adecuado para un vampiro, que son, como todos sabéis, "fotofóbicos" (al igual que casi todos los personajes de las películas españolas recientes: ¡mi gran oportunidad!)

Esta foto no tiene nada que ver con mi historia; pero ahí queda.

Esta ya sí tiene que ver:

Los cines Liceo están cerrados desde hace años. Y vacíos. El cine español también parece estar cerrado y vacío. Qué mejor que tratar de llenar ambos de un solo golpe.

Eduardo Huang es la salvación del cine español. Por chino, por vampiro; y porque sabe hacer del cine un lugar habitable.

Mirad qué hice.

Primero puse unas cruces. Tanto para certificar la muerte del cine español como la fe que tengo en mí mismo.



Puse dos para que el letrero: PARA ENTRAR SITUESE EN SU NÚMERO DE SALA, tuviera algún significado. La cruz grande es para los adultos; la cruz pequeña, para los niños.

Luego le di el toque de gracia.


MUERTE.

Es mi casa de la muerte. Donde traigo a mis víctimas.



Mirad esta foto más de cerca. No voy "de farol", como dicen en los recreos de los viernes.

Es el zapatito de una niña que maté y cuya sangre sorbí con inmenso placer hace dos días.

Un fallo lo tiene cualquiera.